Sqweel Go, el aparato del millón de lenguas

Hoy toca un aparatito de esos que se esconden en la mesita de noche, en el fondo del cajón junto a los pañuelos y el lubricante, y que hace las delicias de los más intrépidos. Después del lanzamiento del Sqweel 2, un Juguete muy recomendable pero algo incómodo y ruidoso, Lovehoney ha puesto a disposición de todos sus fieles una nueva aventura: el Sqweel Go, la edición más pequeña y portable de la familia Sqweel.  Decidimos que era la hora de Comprar el Sqweel Go.

Nada más recibirlo podrás comprobar que el packaging es muy similar al de su hermano mayor, con los colores blanco y rosa predominantes; puedes apreciar toda la información de este artículo en uno de los laterales. Para que siempre tengas presente este juguete, el centro del packaging de este jugete es transparente. Al  abrirlo obtendrás, junto con tu Sqweel Go, una guía de usuario y un cable de carga USB; lo puedes adquirir en rosa, lila o blanco. 

¡Al ataque!

Al principio verás que el juguete es un tanto extraño, es como una especie de mini ventilador repleto de lenguas. No obstante, si miras mejor y empiezas a trastearlo podrás comprobar que las lenguas de silicona son mucho más suaves y flexibles que las de su hermano mayor; y esta vez es ¡recargable!

El cable USB que nos trae el Sqweel Go no viene con un adaptador de alimentación, no obstante no es algo muy difícil de conseguir por casa si tienes otro tipo de gadget o dispositivo móvil.  Si no tuvieras puedes conectarlo a un puerto USB estándar de un ordenador; para cargarlo sólo tienes  que insertar el cargador en la parte inferior para que se encienda una luz azul, cuando esta luz se apaga quiere decir que ya lo tienes con la batería a tope.

Podrás comprobar que el juguete tiene un botón bastante grande, este permite que tras su pulsación puedas controlar sus tres velocidades y sus tres patrones, si lo mantienes pulsados apagarás el Sqweel Go.  

 Experiencia irrepetible

Cuando decides que es el momento de ponerse manos a la obra puedes notar esa sensación de nerviosismo y cosquilleo que sólo aparece cuando sabes que te lo vas a pasar en grande. Utiliza lubricante, no dejas pasar esta oportunidad para darte el gusto completo, para encontrar unas sensaciones muy suaves; mucho más parecidas a lo real de lo que te piensas.

El tamaño de este Sqweel Go es uno de sus puntos fuertes, ya que te permitirá maniobrar todo lo que quieras: moverlo, acomodarlo, girarlo, todo vale para que estés en la posición adecuada en el momento del clímax. Con un poco de práctica te puedes hacer con el juguete y llegar al orgasmo cómo y cuando quieres. ¿Tu clítoris es feliz? Pues si tu afirmación es correcta el Sqweel Go ha hecho muy bien su trabajo.

Inconvenientes

Uno de los inconvenientes que tiene el Sqweel Go es el de la limpieza, ya que es complicado de limpiar debido a su gran número de lenguas, el motivo es que son muy pequeñas y el lubricante se le introduce por ranuras de difícil acceso. Sin embargo, como es resistente al agua puedes utilizarla para dejarlo bien limpio y dispuesto para otra sesión del molinillo. 

¿Si lo has probado no dudes en compartir tu experiencia?