Hacer el amor por el ano

Si coges el Kama Sutra y lo analizas de forma detallas podrás encontrar una infinidad de posturas para la práctica sexual de forma continuada, para abandonar la rutina y probar todos los días algo nuevo. Además, más de una de estas posturas te permitirá estar muy en forma, ya que sin un estado físico óptimo no podrás realizarla. 

No obstante, parece que a los usuarios no les preocupa la búsqueda de posiciones para hacer el amor por el ano. Esta práctica, que está mucho más extendida de lo que la gente cree, requiere de una estimulación previa extensa y muy interesante; además de la utilización de lubricante para que todo ocurra de forma correcta.

Si nos ponemos técnicos cualquier posición sexual, exceptuando algunas, pueden ser más que factibles para la práctica del sexo anal. No obstante, desde Informativo Sexual siempre queremos ofrecerte nuestros consejos para que puedas aprender a hacer el amor por el ano con las mejores posturas. A continuación presentamos cinco posturas con las que podrás comenzar a disfrutar del sexo anal sin ningún tipo de problema.

El misionero

Una de las posturas más clásicas y utilizadas en todo el planeta. Una elección muy recomendable para la iniciación en la práctica del sexo anal: Sitúa un cojín debajo de las caderas de tu pareja para crear un ángulo mucho más adecuado para esta práctica, también las puedes situar encima de los hombros de tu pareja y aumentar el grado de penetración.

Ahora sólo queda comenzar a disfrutar en pareja del sexo anal, con un ritmo lento y muy suave puedes disfrutar de una posición muy íntima y sensual; que te permitirá conversar, besar y disfrutar de tu pareja en primera persona.

La cuchara

Una de esa posiciones más queridas por todos los usuarios para la práctica de ‘el mañanero’, y es que no hay nada más placentero que convertir un abrazo en sexo íntimo y lento. También funciona en la práctica del sexo anal, ya que permite una entrada mucho más íntima y cuidadosa para ir poco a poco hasta conseguir una experiencia más que agradable.

Esta postura permite estar lo suficiente cerca de tu pareja para besarla y estimularla con las manos en aquellos puntos que más le gusten. Tu pareja puede envolver su pierna principal sobre la tuya para aumentar el grado de penetración y permitir una jornada de sexo anal irrepetible.

La Vaquerita

Una de las posiciones más recomendables para la mujer, el motivo es que pueden controlar la profundidad de la penetración y la velocidad con la que esté mucho más cómoda. Más que recomendables para los que se inician en hacer el amor por el ano, ya que en esta posición la mujer coloca las piernas sobre el colchón de la cama y podrá controlar todo el proceso con un simple movimiento.

Con esta postura podrás controlar las embestidas de tu compañero, que pueden no ser agradables cuando esté en un punto muy alto de excitación. Si te gusta un contacto mucho más íntimo y visual con tu pareja, nada mejor que sentarlo contra la cabecera para que los dos quedéis con la cara enfrentada; altamente recomendable para vivir una noche íntima inolvidable, seguro que repetís.

El Perrito

Quizá sea una de las posiciones más socorridas para los primeros intentos a la hora de hacer el amor por el ano. Parece una posición muy sencilla de poner en práctica, sin embargo tiene un inconveniente que, a priorir, parece no existir; y es que tu pareja tiene que ser muy consciente de la velocidad y de la profundidad de la penetración.

Es una de las posturas en las que el ano se encuentra en una mejor posición para la práctica del sexo anal, lo que resulta muy satisfactorio para aquellos que disfrutar con este tipo de inciativa. Pero hasta los más experimentados comentan de la incomodidad de esta posición si su pareja se encuentra demasiado excitada y pierde el control.

Por este motivo, si piensas practicar sexo anal en la posición del perrito tienes que tener en cuenta que la comunicación es clave a la hora de determinar el ritmo y la profundidad de la penetración. El que lleva las riendas de esta postura tiene que ser muy conscientes de que no puede perder el control para atender a las necesidades de su pareja.

La serpiente

Para esta posición se requiere bastante práctica y pericia, pero si la consigues realizar podrás contar con una profundidad de penetración muy alta con una velocidad pausada para mayor disfrute.

Nada más empezar tendrás que acostarte boca arriba con las piernas extendidas, tu pareja se arrodillara a caballo en uno de tus mulos para levantar la otra pierna hasta situarla sobre su hombro.  Con este movimiento podrá utilizar una de sus manos para estimular tus zonas erógenas, ya sea delantera o trasera, mientras realiza una penetración más que placentera.

Como ocurre con cualquier faceta sexual, si tienes la intención de poner en práctica el sexo anal tienes que tener en cuenta que no es una ciencia exacta; cada persona es un mundo y cada pareja requiere de una serie de preliminares personalizados para alcanzar el clímax deseado. ¿Cuál es tu postura favorita?